A ti que sabes como nadie lo que es querer sin egoísmo ni
esperar nada a cambio.
A ti que se te desgarra el alma al vernos sufrir.
A ti que disfrutas con nuestros logros y nuestras alegrías
más que con las tuyas propias.
A ti que sangras por nuestras heridas, que te marcan
nuestras cicatrices y lloras a lágrima viva con nuestras penas.
A ti que darías la vida sin dudarlo por aliviar nuestro
dolor y que mueres de impotencia y rabia por no poder evitarlo.
A ti que por muchos años que cumplamos nunca dejaremos de
necesitarte.
A ti que siempre estás ahí sin cláusulas ni condiciones.
Porque no existe tortura física semejante a la angustia y
al tormento que sufre una madre al
contemplar impotente el padecimiento de un hijo ni felicidad ni orgullo
comparable al que siente al compartir su crecimiento y su dicha.
Por todo eso y mucho más … GRACIAS MAMÁ.
Que precioso homenaje, pues el corazón de una madre es el más hermoso lugar para un hijo y el único que no puede perder aun cuando él lleve ya canas. En todo el espacio del Universo sólo hay un corazón como éste.
ResponderEliminarFelicidades a todas!!!!
Cariños…
Sentido homenaje, que aun nos llega mas hondo a los que hemos tenido la desgracia de perderla en este mismo año y solo podemos besarla en el recuerdo.
ResponderEliminarUn abrazo.
me uno a tu homenaje a las madres, que se lo merecen TODO.
ResponderEliminarSegún lo que he leído en tus posteos, tenés un hijo. O sea que me corresponde desearte feliz día.
ResponderEliminar