DE COLORES…
Siempre hay unos malos que visten de negro, dicen.
Yo soy negra, lo sé; negra y de una especie inferior, lo tengo asumido; pero aquí
me tenéis, testigo privilegiado y de excepción
del acontecimiento del año y en primera línea; muy pocos pueden decir lo mismo.
Desde mi ventana veo todo verde; un verde intenso
eso sí, ni pastel, ni pistacho, ni abeto, más bien verde hierba, pero hoy es
diferente; hoy, como diría Maya parece un país multicolor; puedo distinguir
bultos por todas partes; unos fijos, otros en movimiento pero los hay de todos los
colores: blanco nieve, amarillo yema, azules y rojos un poco pálidos, como
desvaídos…Está oscureciendo; el cielo se ha teñido de un precioso tono azul oscuro, casi negro, con destellos rojizos; colgado de él un enorme círculo de plata anaranjado al que los humanos llaman luna y multitud de puntitos brillantes.
Flotando en el aire miles de confetis multicolores anuncian los prolegómenos del esperado momento, cuando se posan en el suelo dificultan y entorpecen mi campo de visión.
¡Por fin! Parece que ha empezado la acción; tengo que acercarme un poco más para ver mejor, no quiero perderme ni un solo detalle aunque es arriesgado y peligroso, lo sé, mi propia vida está en juego.
No había avanzado ni medio metro cuando aquellos dos gigantes cayeron sobre mí: mi muerte fue instantánea; causa de la muerte: pisoteada.
Un señor de amarillo y negro tocó su silbato y señaló el punto fatídico al tiempo que levantaba, eso sí, una cartulina roja: ¡PENALTI!
¿Quién me mandaría a mí salir de mi hormiguero el día del clásico, si ni siquiera me gusta el fútbol?
Más gamas de colores en el Daily´s con los reporteros más dicharacheros...
Bienllegada a los colores!!
ResponderEliminarGracias por participar y salir del hormiguero con mejor suerte!!!
saludos x 2
jejeje, que buen relato, Tere, y pobrecita hormiga :)
ResponderEliminarUn abrazo
Lola
No, si harás que tome cariño a una hormiga.
ResponderEliminarPor cierto, morir pisoteada bajo la bota del árbitro que pita un penalty en un clásico no es moco de pavo (rojo), tiene su tema.
Muy bueno, Tere. Besos.
Jajaja, qué bueno!!!
ResponderEliminarJejeje, era prima segunda de trancas y barrancas, seguro!!! Y mira lo que le pasó por curiosa. Y por no pagar la entrada :)
ResponderEliminarMuy gracioso.
Un abrazo <3
jajajaj no me podía imaginar ese final! jajaja...no creo que haya habido nadie que lo pudiera vislumbrar! jejejee
ResponderEliminarUn abrazo
Es verdad Tere, me has hecho ver que bajo el césped donde se reparten patadas, existe un universo multicolor, aunque sea negro hormiga.
ResponderEliminarExcelente creatividad, el énfasis en lo diminuto que ignoramos. Tampoco me va el futbol, mejor se hubiera quedado en el hormiguero, lástima. Felicitaciones y besitos.
Muy bueno, una hormiga. Bien descrito, e intriga hasta el final.
ResponderEliminarUn abrazo
Nooooo... ¡pobrecita hormiga!.
ResponderEliminarQue diferente resulta el mundo con sólo cambiar el punto de vista. Magnífica tu imaginación.
Un abrazo.
has estado kafkiana. ¿Qué se sintió más allá del abarrotamiento producto del clásico? ¿Cómo es eso de poder inmiscuirse en todas partes sin que la mayoría de las veces se percaten de nuestra presencia?
ResponderEliminarOriginal, mi querida.
Muy bueno, sí señora. Yo pensando en temas de racismo... y mira por donde sales!
ResponderEliminarBss-
jajajajajajaja
ResponderEliminar¡Excelente!
Así, sin mas.
Me conquisto esa linda hormiguita.
Abrazo en colores.
Muy original el trabajo. Todo el mundo pensaba otra cosa. Un beso.
ResponderEliminarORIGINALIDAD, POR ELLO TE APLAUDO...
ResponderEliminarTE DESAPLAUDO POR QUE EL QUE TIRABA EL PANALT ERA UNO DEL MADRID...DEL REAL MADRID, Y LO ACABAS DE LLAMAR ASESINOO¡¡, DE HORMIGAS, CLARO ESTÁ¡¡¡
Y COMO NOTA CURIOSA: MIENTRAS ESTUVE VENDIMIANDO OBSERVÉ UN CAMINO DE HORMIGAS QUE MEDÍA MÁS ALLÁ DE LOS 300 METROS...¡¡¡ERA UNA AUTOPÌSTA!! ¡¡Y NO PISÉ A NINGUNA HORMIGA DE TAL CAMINO...!!
MEDIO BESO.
jajajajaja, bien, bien...me habías tenido mareado un buen rato, sobre todo cuando has escrito esa preciosidad de la luna y las estrellas. Pero era fúttttttttttbooooooool, al menos espero que fueras con el Barça...jeje
ResponderEliminarUn beso (tienes respuesta en lo de San, jajajaja)
Da que pensar, imaginarse una hormiga que tiene el hormiguero en un campo de futbol: un mundo para ella tan verde y tan peligroso. Me gustó mucho.
ResponderEliminarLa pequeña hormiguita se las prometía muy felices entre tanto confetis de colores y, en cambio, tuvo un triste final. Eso le pasa por curiosa. Si para colmo no le gustaba el fútbol ¿qué demonios hacía allí? jeje. Un beso.
ResponderEliminar¡Jo, que dificil es la vida de las hormigas!. Si es que de un Madrid-Barca no puede esperarse nada bueno. Cuando juega el Valencia siempre intentan pisar el cesped sin maltratar a las hormiguitas o a los bichitos que pululan por el campo, son muy delicados. ¡Por eso siempre pierden!, jajaja.
ResponderEliminarEn serio Teriri, muy divertido y original tu relato, es sorpresivo y te deja con una sonrisa en los labios.
Por cierto me han dicho que últimamente no ves demasiado bien de cerca. Lo digo por las gafas, ya sabes que tengo remedios, jaja.
Un abrazo grande
Pobrecita, esta hormiguita negra, no respetan ni el deseo de su pasear por ese fresco cesped verde. Muy divertido Teresa.
ResponderEliminarUn abrazo.
jajajajaja...muy ocurrente tu entrada
ResponderEliminarA quien se le ocurre. ¿Nadie le había informado que los clásicos siempre están catalogados como partidos de alto riesgo?, mejor, mucho mejor, seguirlo por la tele, pero claro las hormigas negras carecen de tele.
ResponderEliminarDivertido y original enfoque, Tere.
Un abrazo.
Jajajaja pobrecita!!! Ahora eso de que es inferior no lo creo, las hormigas son muy astutas, y están mucho más organizadas que nosotros.
ResponderEliminarUn final de lujo.
Un abrazo.
Jejeje pobre! No me lo habia imaginado. Jejeje. Qué lindo relato. Buen fin de semana. Un beso.
ResponderEliminarGenial Tere, genial y divertido.
ResponderEliminarLo he disfrutado plenamente en posteriores lecturas.
Normalmente no me interesa mucho el contenido del relato, el tema sólo es una excusa para disfrutar escribiendo, y leyendo.
En esta ocasión continente y contenido van a la par... Fantásticos.
Abrazos
jajajaja... me ha encantado muy divertido final, muy ingenioso
ResponderEliminarEn nombre de esta tierna hormiguita que por curiosa perdió el clásico y la propia vida y en el mío propio quiero dar las gracias a todos los que os habéis pasado por aquí interesándose en su historia y en su mala fortuna y habéis dejado vuestras condolencias y vuestros comentarios:)
ResponderEliminarMuchos besos a tod@s!
Me he reído mucho y eso se agradece doble. Un relato encantador que nos sorprende como un pisotón.
ResponderEliminarbesos, Tere.
Quiero dejar mis aplausos aquí plasmados por este fenomenal relato. Es fantástico a pesar del triste final. No soy capaz de pisar una.
ResponderEliminarUn saludo muy cordial. Feliz semana.
mirá que lindur de colores y de risas!
ResponderEliminarqué loca imaginación!
aplausos!
Todos queremos obviar los malos tragos y magnificar los idílicos con colores. El factor del relato asume el tono y muestra la fantasía; "sera que todo es tan relativo como uno idealiza". Cada uno tiene sus dilemas, a mi me encanto un texto inolvidable.. un saludo
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