martes, 17 de enero de 2012

PARA ADRI... QUE NO ME OLVIDO DE TI

A MI HIJO LE CAIGO MAL

Pues sí, como lo oyes, no sé si reír o llorar, o simplemente pensar que son los daños colaterales de tener un hijo preadolescente. Pero cuando empiezas a recuperar tu vida, tu tiempo y te vuelven a valer los vaqueros de la 38, cuando ya casi se te ha olvidado lo que es cambiar pañales y dar biberones, un día te das cuenta de que tu niño, tu bebé, tiene una voz de pito muy rara, la cara se le ha llenado de granos y no quiere tener nada que ver contigo.

-          Y ¿por qué te caigo mal, cariño?

-          Bueno, no me caes mal del todo, ni bien, no me caes ni bien ni mal.

-          O sea, que tu madre, la persona que más te quiere, que te ha traído al mundo y te ha dado la vida, ¿te es indiferente?

-          Bah, pero no es para ponerse así,  tampoco me caes tan mal…sólo un poco.

-          Eso hijo, tú arréglalo ahora…que si lo sé me compro un perro.








3 comentarios:

  1. Creo que lo ha escrito por mí.
    Es un relato basado en hechos reales.
    Es buenísimo.

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